Qué ocurriría si la araña Joro invade México y qué peligro hay si otras especies emigran
El fenómeno de la expansión de la araña Joro (Trichonephila clavata) en Estados Unidos comenzó a llamar la atención por la posibilidad que su migración pudiera extenderse incluso a México, hecho que posiblemente derivaría en consecuencias graves que impactaría no solo en el medio ambiente sino también en materia económica.
Sin embargo, la expansión de la araña considerada como una especie exótica invasora, se ha presentado desde 2014 solamente en Estados Unidos, particularmente en Atlanta, donde ha impactado en el medio ambiente al capturar a otros insectos al quedar atrapados en sus grandes telarañas que colocan en espacios semiabiertos.
¿CÓMO ES LA ARAÑA JORO Y CUÁL ES SU ATAQUE?
De acuerdo con el maestro en Ciencias Biológicas con enfoque en sistemática de arácnidos, Diego Barrales Alcalá, miembro de la difusión de Ciencia y Tecnología del Instituto Politécnico Nacional, explicó que aunque la expansión de la araña Joro se ha ido hacia Tennessee, no representa una alarma de una invasión.
El biólogo detalló para El Heraldo de México que Joro es originaria de Asia del este de países como Japón, y como principales características cuenta con un gran tamaño que puede llegar a medir con todo el cuerpo y sus patas, alrededor de 8 centímetros, tiene unas telarañas bastante grandes y se alimenta de insectos voladores principalmente, cuyas patas son de color oscuro, con cola de color amarillo.
Dado que su telaraña es muy resistente, pueden llegar a capturar pequeñas aves, “la araña puede llegar a depredar, este es un fenómeno que se presenta no solo en estas arañas, sino en otros tipos de arácnidos, que incluso pueden llegar a capturar presas vertebradas… Si son capaces de capturarlas son capaces de devorarlas”.
¿QUÉ HACE QUE NUEVAS ESPECIES LLEGUEN A OTROS PAÍSES?
Barrales Alcalá indicó que la presencia de especies inéditas en ecosistemas nuevos se debe a varios factores, entre ellos a través de fenómenos naturales como tormentas, ciclones, pero además por la mano de los hombres, “los humanos llevamos siempre con nosotros especies, algunas veces de manera inconsciente, vamos a pensar en los primeros viajes en barcos, donde se metían ratas que llegaban a otros lugares y colonizaban”.
A las nuevas especies se les conoce como exóticas invasoras al interactuar con el nuevo medio, y aunque en ocasiones resulta beneficioso sobre todo con el combate de plagas, también complica, aunque el experto precisó que hay varios factores que complican la adaptación de la nueva especie invasora. Aunque enfatizó que el caso de la araña Joro no es mortal para la humanidad ya que es inofensiva.
¿CUÁLES SON LOS RIESGOS DE ESPECIES INVASORAS?
De extenderse a México, la araña Joro estaría compitiendo con arañas nativas como lo hizo en Estados Unidos, compartiendo el mismo nicho ecológico que influyen en la permanencia de una especie en el entorno, por lo cual puede frenar su invasión, pero cambiando de dirección poniendo en riesgo otro ecosistema, por lo tanto las probabilidades de que llegué al país son bajas, precisó Barrales Alcalá.
Sin embargo, el experto citó como ejemplo de especies que llegan para quedarse el caso de la llegada a México de la cotorra argentina, especie exótica invasora que se extendió en gran parte del,mundo que ha ido desplazando a especies nativas que representan peligro en la ecología,las cuales comenzaron a dispersarse por la mano del hombre al comercializarlas dado su atractivo visual.
Para contrarrestar se deben hacer estrategias de captura y sacrificio o control de nidos de especies para evitar que pululen y afecten en impactos de los hábitats que afectan a las cosechas o mares como el caso del pez limpiapeceras que ha sido liberados en ríos del país y las tilapias en Xochimilco que ponen en peligro de extinción el ajolote.
Sin embargo, señaló que hay casos de especie que salieron de control como la llegada de la rana Toro en Australia (cuyo caso quedó citado un episodio de Los Simpson), “lo ingresaron para aprovechar comercialmente el consumo de su carne, resultó tóxico para los depredadores naturales como cocodrilos y serpientes y empezó a tener crecimiento desmedido en Australia que aún no es controlado”. acotó. (El Heraldo de México)